martes, 14 de agosto de 2012

Expresiones emergentes “no necesitan legitimación” de la cultura dominante

  • Terminó la primera Bienal Continental de Artes Indígenas Contemporáneas
  • Critica escritor “la visión nacionalista, independentista y revolucionaria” de los gobiernos
 Arturo Jiménez

Periódico La Jornada
Martes 14 de agosto de 2012, p. 6

Como “culturas periféricas”, las artes indígenas contemporáneas experimentan procesos de “ruptura, innovación, experimentación y emancipación”, aseguró el lingüista y poeta mazateco Juan Gregorio Regino, también director de Desarrollo Intercultural de la Dirección General de Culturas Populares.

Regino habló durante la clausura este viernes de la primera Bienal Continental de Artes Indígenas Contemporáneas, que duró cinco días e incluyó mesas, conferencias, la premiación a diversos artistas de Colombia, Venezuela y México y una exposición de las obras de 50 creadores participantes, que permanecerá en el Museo Nacional de Culturas Populares (avenida Hidalgo 289, Coyoacán) hasta el 14 de octubre.

“Hoy tenemos la posibilidad de establecer un diálogo, de escuchar dos visiones de un mismo objeto de reflexión, lo que sin duda enriquece el patrimonio intelectual de todos”, dijo el escritor.

Recordó que, desde mediados del siglo pasado, en cada país del continente se comenzó a volver la mirada hacia los pueblos originarios en la búsqueda de alternativas frente a la homogenización cultural del capitalismo.

“Paralelamente, entre los pueblos indígenas tomó mayor fuerza su movimiento artístico y comenzaron a pensarse como referente para la vigorización geopolítica, cultural y artística de los países.”

Dijo que las artes indígenas contemporáneas son expresiones de “identidades colectivas”, surgidas de nuevas formas y técnicas vinculadas con “la tradición, lo comunitario, lo agrícola-ritual y lo cotidiano”.

Esas artes, agregó, sintetizan nuevos contenidos, estilos y corrientes como resultado de experiencias interculturales en las que se genera una influencia mutua. “Este proceso creativo permite que dos manifestaciones culturales relativamente diferentes se hagan una”.

El poeta destacó la “emergencia de una estética local”, planteada en dos perspectivas: el desarrollo del pensamiento “intraestético” y la contribución al desarrollo intercultural.

“Muchas tesis que han sostenido la cultura y las artes son obsoletas, no porque el proceso colonial haya terminado, o porque el indigenismo se haya transformado, sino porque existe una fuerte cultura popular que está generando expresiones emergentes que rompen con cánones y que no necesitan legitimarse por el aparato cultural y económico dominante.”
Criticó que la política cultural de los estados mantenga una visión “nacionalista, independentista y posrevolucionaria” tendiente a la homogenización cultural, pese al reconocimiento formal de la diversidad cultural.

Acoso a la diversidad cultural

A escala global, planteó Regino, “vivimos un proceso neocolonial dominado por una economía de mercado mundial bajo el control de Occidente, que tiende a normalizar, racionalizar y transnacionalizar de maneras hostiles a la diversidad cultural”.

Eso, junto con el consumismo y la competencia en un mercado mundializado, erosiona a las culturas locales y desaparece sus formas de expresión, agregó. En ese contexto, concluyó, tendrán que formularse las respuestas a las diversas interrogantes surgidas en esta bienal.

Antes de la clausura se realizó una mesa en la que la fotógrafa maya Flor Canché planteó que ella no veía una distinción entre los artes “indígena” y “contemporáneo”. El arte contemporáneo indígena, agregó, es esta manera de transmitir una idea y concepto con elementos actuales pero con una fuerza ancestral.

“No se necesita que todo sea nuevo o distinto a lo antes presentado”, dijo. Acerca de cómo experimenta el proceso o momento creativo, comentó que hay casos en que tiene una ubicación más en lo individual y otros en que es más hacia lo colectivo.

El fotógrafo zapoteco Baldomero Robles coincidió con Canché en la primera reflexión y agregó que el arte contemporáneo es el mismo, sea indígena o no. Y respecto de su experiencia creativa, dijo que en su caso es más individual e interior, pero siempre con una referencia a su raíz cultural.

Antes, la experta Ingrid Suckaer dio una conferencia magistral.

http://www.jornada.unam.mx/2012/08/14/cultura/a06n1cul