martes, 23 de marzo de 2010

ADIÓS AMIGO, CARLOS MONTEMAYOR

Natalio Hernández
Niquixmatqui Carlos Montemayor quipia sempoali ihuan mahtlactli xihuitl/ Conocí a Carlos Montemayor hace 30 años. Compartimos, por primera vez, nuestra palabra en una mesa redonda sobre el tema: Los pueblos indígenas y el Estado mexicano que organizó la Escuela para Extranjeros de la UNAM. Nunca antes nos habíamos visto. Sin embargo, cuando nos escuchamos, se estableció una empatía que nunca más se rompió.

Juntos emprendimos la agotadora labor de sensibilizar a mis compañeros, maestros bilingües, de que las lenguas originarias de México eran importantes, que no eran dialectos y tampoco eran lenguas inferiores. Esta labor se fue extendiendo, poco a poco, a todos los sectores de la sociedad, para superar el estigma que dejó la escuela rural mexicana en contra de las lenguas indígenas.

En 1990 coordinamos el Encuentro Nacional de Escritores en Lenguas Indígenas con el patrocinio de la Dirección General de Culturas Populares del CONACULTA y el Instituto Tamaulipeco de Cultura. Por primera vez en nuestra historia contemporánea, se reunieron los escritores de las diversas lenguas originarias de México, para intercambiar sus experiencias en torno a la creación literaria en sus propios idiomas.